- ¿Qué actitudes ve en niños que quizás vayan a ser problemáticos?
- Un cochecito de trillizos. Uno va dormido genial, pachorro; el otro es el tocapelotas que le está intentado quitar el chupete y el otro se está chivando a la madre. Los tres son diferentes, pero se tiende a educarlos igual. Y no. Hay uno que va a cumplir las normas sí o sí, porque es muy dócil; hay otro que te lo va a poner un poco más difícil pero al final las cumple y, con el otro, tienes que dar el resto. Lo que pasa es que estos son los más 'graciosos', de los que se dice 'fíjate que gracioso, me ha dado una patada'. Desde ese momento el chaval empieza a generar el pensamiento de que es el rey del mambo. Con tres años puedes controlar una pataleta, con 16 no.
- ¿Son los que se hacen dueños del mando de la tele?
- Tengo un caso de 'Hermano mayor', el de un chaval maltratador psicológico. La madre se casa en segundas nupcias. El niño tenía 5 años y dice que quiere ir a la luna de miel. Llega a ser mi hijo y le digo que no. Pues el niño no solo fue, sino que decidió adónde iban. ¿Cómo le vas quitar la autoridad cuando tenga 18? Temas como el mando de la tele o ir delante en el asiento del copiloto son fundamentales. Parecen pequeñas tonterías, pero no les damos la importancia que tienen en la estructura mental que desarrolla el hijo. Si le permites hacer algunas cosas con cierta edad, le ríes todas las gracias, no le dices nunca que no... Al final no te quiere porque no le has educado. No le han enseñado que la vida es sufrimiento, superación, frustración y también tiene momentos de alegría, que vienen siempre si sabes los tres primeros.
- ¿El éxito ya no es consecuencia del esfuerzo y el sacrificio?
- Noto que mucha gente ha estado viviendo en la burbuja de ganar mucho dinero, porque fue muy bien la construcción, e inculcaron a sus hijos que dejaran de estudiar y se pusieran a trabajar. Porque cuando ganas dinero eres exitoso. Como cuando sales en televisión. Los chavales tienden a identificar éxito con popularidad, aunque sea por ser el que más insultos dice... Algunos chavales me dicen que quieren ser como Belén Esteban. '¿Qué valores te transmite?', les pregunto. No saben contestarte porque la palabra valores no se la han enseñado en casa.
- ¿Cómo influyen las nuevas tecnologías, los teléfonos inteligentes, facebook, tuenti...?
- El problema no es la tecnología, sino el uso que se hace de ella. A veces los padres pasivos dicen que qué bien les viene facebook, twitter... para que el hijo no les toque las narices. 'Vete al ordenador hijo', dicen. Y les ponen internet a altísima velocidad, a 100 megas ó a un giga, a 100 euros al mes, lo cual para mí es un artículo de lujo. Y los chavales no es que tengan un' smartphone', es que te exigen uno, porque de lo contrario no están integrados en el grupo. Al final somos los padres quienes estamos cayendo en la trampa del consumismo, de darles cosas sin que las valoren. Piensan que todo está ahí a su disposición. Si puedes permitirte darle el 'smartphone', internet y ropa de marca dáselo, pero que sepa lo que valen las cosas.
- ¿Qué me dice del padre colega?
- Es lo fácil, porque así no te peleas con tu hijo. Como padre te quieren muchísimo más cuando les pones normas, más si eres capaz de hacérselas entender, cuando eres flexible cuando toca serlo... No hay un manual. Pero es más cómodo no discutir, sobre todo de los 12 a los 18 años. Y si me tengo que fumar cuatro porros con él, me los fumo y soy un padre guay. Luego cuando les hablamos de poner normas, te dicen '¡Pero cómo, si me va a abrir la cabeza!' Haberlas puestos antes.
- ¿Ve a padres que discuten la autoridad del profesor?
- En la conferencia ponemos el ejemplo de una niña a la que el profesor le dice una cosa, como que en clase de Matemáticas no se hacen los deberes de Sociales. A los 15 minutos el padre estaba en la puerta del instituto para pegar al profesor. Imagínate a esa niña el día de mañana, a la primera adversidad su papaíto no va a estar. Esa niña es una discapacitada para vivir en sociedad.
- En 'Hermano mayor' se ven situaciones límite. ¿Hasta qué punto está guionizado el programa?
- Mira el informe sobre las agresiones de hijos a padres que habéis publicado. Es la realidad. Lo que sorprende a la gente es que lo hagan delante de una cámara. ¿Por qué lo hacen? Porque se ha normalizado. Se ha normalizado lo que es absolutamente anormal, inaceptable, y es que un hijo le diga al padre lo que tiene que hacer el padre, no el hijo. Se han cambiado los roles. Se ha normalizado tanto el rol de autoridad que ha cogido el hijo, en plan tirano, que les da igual que haya una cámara. De guión nada. Nunca le diría a un chaval 'haz esto para salir en la tele', pero sí lo que no les han dicho sus padres y les saca de sus casillas: que hagan la cama, que se levanten a la hora, que recojan, que no les voy a dar los cinco euros...
El Diario Vasco 28/5/2014